Serie: Fuera de Series

Técnica: Acrílico sobre tela

Medidas: 50 x 50 cm

Año: 2023

Inspirado en una foto de @mamaartphotos at Köyliönjärvi
En la cariñosa memoria de Omar Osvaldo García.

Terminé este cuadro la noche anterior al fallecimiento de mi padre, el jueves 17 de agosto, hace apenas tres días.
A medida que lo pintaba, sabía que estaba dejando en mi obra la imagen de una despedida, aunque no pensé que fuera esta.
Su alma levantó vuelo y finalmente descansa en paz, su esencia es libre al fin y queda en mí lo mejor de su espíritu.
Este es mi homenaje a nuestro último adiós, su recuerdo vivirá siempre en mi, como un cielo encendido por la luz del sol iluminando el horizonte.

Serie: Fuera de Series

Técnica: Acrílico sobre tela

Medidas: 90 x 100 cm

Año: 2021

Inspirado en una foto de Galaxy Echoes of Pelican Nebula..
Dedicado a Kathia Osorio con todo mi cariño como homenaje a nuestra amistad.

Expandirse es crecer, llegar a lugares más allá de lo imaginado, trascender los propios límites.
Este momento nos encuentra en esa situación, y es lo que representa esta pintura: un punto del que ya no hay retorno, una inercia que nos impulsa a nuevos horizontes, desde el centro de nuestro ser.
Momento de expansión, un presente mágico, que proyecta la energía creativa sin límites.

Serie: Fuera de Series

Técnica: Acrílico sobre tela

Medidas: 90 x 100 cm

Año: 2021

Inspirado en una foto de Juuso Hämäläinen en Laponia Finlandesa.
Dedicado a Kathia Osorio con todo mi cariño como homenaje a nuestra amistad.

Pájaro Azul es un poema que escribió mi gran amiga Kathia Osorio, cuando éramos compañeras de escuela, y que hoy se convirtió en una pintura, a través de mi arte.
Representa un ciclo de vida, una evolución constante, un renacer.
Es la voz interior que guía los pasos hacia el mejor destino, transmutando energías e iluminando la conciencia.
Gracias por confiar en mí, poniendo alas creativas a nuestra gran amistad.

Serie: Fuera de Series

Técnica: Acrílico sobre tela

Medidas: 40 x 50 cm

Año: 2020

Inspirado en una foto de German Brahim en Colón, Provincia de Buenos Aires.

A veces un charco de agua de lluvia nos descubre una imagen sin tiempo, o nos lleva a un recuerdo de la infancia, donde los pinceles se batían a duelo con la locura entre risas y miradas desafiantes.

Como sea, el otoño siempre vuelve a invadir los espacios con colores mágicos y nos invita a mirar la vida desde otro lugar.

Serie: Fuera de Series

Técnica: Óleo sobre tela

Medidas: 40 x 50 cm

Año: 2007

El Ave Fénix es un enorme pájaro envuelto en llamas y de plumaje rojo anaranjado, como el fuego.

Se trata de un ser mágico y fabuloso que ha sido retratado en las diversas mitologías.
Se cree que fue el único animal del Edén que resistió la tentación, lo que le convirtió en un ser eterno.

Este animal simboliza para las distintas culturas prácticamente la misma cosa: la inmortalidad y la resurrección.

Una tradición judía afirma que el chol fue el único animal del Edén que resistió la tentación y conservo la vida eterna.

Los egipcios modificaron un poco esta historia y dieron a esta ave el nombre de Fénix, vocablo que se refiere a su color rojo, considerándolo un animal fabuloso, una especie de semidiós.

Según la tradición, el Ave Fénix, representaba al sol que muere por la noche y renace por la mañana, por este motivo esta ave se consumía por acción de su propio fuego cada 500 años, y un Ave Fénix nueva y joven surgía de sus cenizas.

Este mito se extendió ampliamente entre los griegos, que le dieron el nombre de Phoenicoperus, que significa alas rojas, apelativo que se extendió por toda la Europa romana.

Durante el Imperio Romano los primeros cristianos, influidos por los cultos helénicos, hicieron de esta singular criatura un símbolo viviente de la inmortalidad y de la resurrección.

Otro simbolismo que se le da al Ave Fénix es de la esperanza, ya que representa la esperanza que nunca debe morir en el hombre.

En este cuadro muestra una imagen del Ave Fénix diferente de la tradicional, un instante mágico que conjuga dos opuestos: el agua y el fuego, unidos en los reflejos de cristales preciosos, ofrecidos por un espíritu etéreo.